La “Viagra femenina” que viene

La revista BMJ recoge un comentario sobre cómo se llevo a cabo el proceso de aprobación el pasado 4 de junio por parte de la FDA de flibanserina, la “Viagra femenina”. El comité asesor de la agencia reguladora estadounidense aprobó, por 18 votos a favor y seis en contra, su comercialización como tratamiento de la falta de libido en la mujer en el período premenopáusico.
Llama la atención que el comité asesor de la FDA había rechazado, de forma unánime, su aprobación en anteriores ocasiones, argumentando que el beneficio del nuevo medicamento era escaso (un 10% mejor que el placebo) y sus potenciales efectos secundarios preocupantes (hipertensión y síncope). Estas decisiones fueron seguidas de una extensa campaña del laboratorio fabricante a diferentes niveles, desde acusar al organismo regulador de sexista por aprobar medicamentos para la disfunción sexual del varón (sildenafilo y similares) pero no para las mujeres, crear un lobby de presión para influir sobre el Congreso estadounidense, y utilizar los testimonios individuales de algunas mujeres afectas de este nuevo problema de salud (la falta de libido), apoyados financieramente, como no, por el laboratorio fabricante del producto. Con esta elaborada estrategia el laboratorio fabricante seguramente no llevó a cabo ninguna acción ilegal, aunque sin duda poco ética, pero la ética suele ser secundaria cuando se trata de conseguir beneficios, aunque sea a costa de inventar enfermedades.






Al margen de las coincidencias, hagamos votos porque que la agencia reguladora europea, la EMA, no apruebe el medicamento en nuestro medio, aunque es previsible que claudique ante las presiones del laboratorio envalentonado ante el éxito americano. En ese caso, esperemos que el Ministerio de Sanidad español no pierda el juicio y no financie el nuevo producto.
Acto seguido: las visitas en los pasillos, las separatas, las sesiones clínicas, las comidas de trabajo, los talleres, los simposios, las reuniones y declaraciones de los expertos…